GUANARE, SEDE EPISCOPAL

Monseñor Pedro Pablo Tenreiro, primer Obispo de Guanare

La erección de Guanare en Sede Episcopal era otro de los deseos que muchos de los devotos de Nuestra Señora de Coro-moto anhelábamos conseguir.

El Padre Dr. Víctor José Pineda fue el primero en romper fuego en esta campaña, con la publicación de un artículo en «La Religión» en que abogaba por esta nueva Diócesis.

Como estábamos entonces en íntimas relaciones con Monseñor Enrique María Dubuc, Obispo de Barquisimeto y, por tanto, también de Guanare, no podíamos trabajar abiertamente en este asunto, pero sí de un modo indirecto, pero muy real y efectivo.

Un día que llegaron a Barquisimeto el Dr. Pedro Blanco Gas-peri, entonces Director del Ministerio de Sanidad y Asistencia Social, con el Ministro del mismo ramo, Dr. García Alvarez, ambos guanareños, se les hizo ver la conveniencia de que Guanare fuese elevada a la categoría de Sede Episcopal; el Culto de Nuestra Señora de Coromoto lo requería. Ambos prometieron trabajar sobre este particular y tratar el asunto con el Sr. Presidente de la República, para presentar la solicitud a la Nunciatura y a la Santa Sede.

El Dr. F. Saturnino Angulo Ariza fue también una decidida palanca para el buen resultado de esta campaña.

Cuando estuvo vacante el Obispado de Barquisimeto, propusimos a Monseñor Pedro Pablo Tenreiro para Obispo de esta Diócesis, a la cual pertenecía Guanare, por su total consagración al Culto de Nuestra Señora de Coromoto.

El Gobierno aceptó nuestro candidato, pero la Nunciatura nos manifestó que la Santa Sede había ya escogido a Monseñor Críspulo Benítez Fontúrvel para le Sede Episcopal de Barquisi. meto, lo que nosotros ignorábamos totalmente. Además, el Señor Nuncio nos recalcó la conveniencia de que nosotros apoyáramos más bien a éste último ante el Gobierno para acelerar todo lo relativo a su definitiva aprobación. Así convinimos, pues tuvimos los mejores informes sobre la personalidad religiosa de Monseñor Benitez Fontúrvel.

Una vez consagrado Obispo de Barquisimeto, Monseñor Benítez Fontúrvel se mostró gran protector del Culto coromotano.

En su escudo Episcopal quiso que figurara el Santuario Mariano de Guanare, y bajo su dirección e impulso. el movimiento en favor de Nuestra Señora de Coromoto iba a tomar un veloz giro ascendiente que nos llevaria a la canónica coronación de Nuestra Señora de Coromoto y a la creación del Obispado de Guanare.

Monseñor Críspulo Benítez Fontúrvel. Prelado inteligente v lleno de amor Divino y Mariano, personalmente nos dijo varias veces que no solamente no era contrario a la creación del Obispado de Guanare, sino que lo deseaba ardientemente en obsequio a la Madre de Dios.

Después de la solemne Coronación de Nuestra Señora de Coromoto, el 11 de septiembre de 1952 y de su gira triunfal por todos los ámbitos de la Patria, de común acuerdo. el Episcopado Patrio. el Gobierno Nacional. la Nunciatura y la Santa Sede convinieron en la inmediata creación del Obispado de Guanare. que abarcaría los Estados Portuguesa y Barinas.

Pedimos entonces que Monseñor Pedro Pablo Tenreiro fuese nombrado primer Obispo de Guanare. Se trató primeramente al asunto con el Gobierno de la República. quien aceptó nuestra proposición, y Monseñor Arias. entonces Arzobispo de Caracas. con quien gestionamos el mismo tema. nos manifestó que aceptando Monseñor Tenreiro, él se encargaba de proponerlo al Nuncio y a la Santa Sede; así se hizo, y teniendo la seguridad de este nombramiento. nos quedaba entonces la gran labor de preparar con urgencia el edificio de su residencia. o sea. la construcción del Palacio Episcopal. Los planos del mismo se ejecutaron bajo la dirección del Dr. Calvani, y dimos seguidamente comienzo a las obras.

Hacemos constar que los fondos necesarios para esta labor fueron sufragados por las dádivas que recogimos en la jira Coromotana y otras que nos llegaban semanalmente debido a las dos emisiones de radio que dirigíamos cada semana y a los Sorteos Coromotanos que realizábamos cada trimestre del año.

EL ILUSTRÍSIMO SEÑOR DON PEDRO PABLO TENREIRO, OBISPO TITULAR DE ORTOSSIA, PRIMER OBISPO DE GUANARE

La Santa Sede extendió el nombramiento de Primer Obispo de Guanare a Monseñor Pedro Pablo Tenreiro en agosto de 1954, y tomó posesión de su cargo el 24 de octubre de aquel mismo año.

La ciudad de Guanare le hizo un caluroso recibimiento y pudo estrenar el Palacio Episcopal recientemente inaugurado y bendecido.

Monseñor Tenreiro, por espacio de once años consecutivos, estuvo al frente de la Diócesis de Guanare, en la cual desarrolló una labor verdaderamente extraordinaria.

Al impulso de su grande amor a la Augusta Madre de Dios, en su advocación de Coromoto, no escatimó trabajo ni gasto alguno para afianzar su culto y organizar bases sólidas para el sostenimiento de los obreros evangélicos de la naciente Diócesis, confiada a sus cuidados y desvelos.

Entre las muchas obras que realizó o que le deben su exis-tencia, citaremos las siguientes: El edificio del Seminario; la construcción de 27 Capillas en los caseríos que las necesitaban; el hermoso Trono de bronce, en el cual, a diario, se expone la Sagrada Reliquia de Nuestra Señora de Coromoto y el monumento o Santuario abierto, en el propio sitio de la Aparición de Nuestra Señora de Coromoto.

La Basílica Nacional le debe los gigantes candelabros del Presbiterio, las vidrieras; importantes trabajos ornamentales: la adquisición de valiosos enseres y piezas destinadas al culto Divino.

A él se debe también la adquisición de la riquísima y artística Custodia de oro y piedras finas para las solemnes exposiciones del Santísimo Sacramento. Ya hemos visto también cómo es a Monseñor Tenreiro a quien debemos el maravilloso relicario para la Coronación de Nuestra Señora de Coromoto.

Supo hábilmente crear rentas para la formación de los aspirantes al Sacerdocio y ayuda a las parroquias necesitadas.

Presentar una enumeración detallada y completa de las labores realizadas por Monseñor Tenreiro en los años de su Pontificado será obra de quien se proponga, algún día, escribir la biografía de tan insigne como meritorio Prelado.

Por graves motivos de salud, muy a pesar suyo, Monseñor Tenreiro se vio en la imperiosa necesidad de renunciar al Obispado de Guanare.

Para que la diócesis no quedase desatendida, la Santa Sede nombró a Monseñor Dr. Víctor José Pineda, quien desempeñaba el cargo de Vicario General, Administrador (sede vacante) de la diócesis de Guanare, función que desempeñó dignamente hasta la llegada de Monseñor Herrera Riera, segundo Obispo de Guanare.

GUANARE. Entronización del primer Obispo de Guanare, Ilmo. Sr. Pedro Pablo Tenreiro. Durante el discurso del Dr. F. Saturnino Angulo Ariza, de izquierda a derecha: Mons. Tenreiro, Gobernador del Estado Portuguesa, Monseñor Benítez Fontúrvel, Obispo de Barquisimeto:
Monseñor Armando Lombardi, Nuncio de Su Santidad; el Sr. Arzobispo de Caracas, y el Dr. Octavio, del Ministerio de Justicia y Director General de Cultos

MONSEÑOR EDUARDO HERRERA RIERA, SEGUNDO OBISPO DE GUANARE

Monseñor Eduardo Herrera Riera, segundo Obispo de Guanare

Para ocupar la sede vacante de Guanare, la Santa Sede nombró al distinguido y celoso párroco, Pbro. Eduardo Herrera Riera, quien se había destacado por sus virtudes sacerdotales al frente de la parroquia confiada à su digno cargo.

La bula de su nombramiento para la Sede Episcopal de Gua-nare es del 30 de noviembre de 1966, y el 21 de enero de 1967 tomó posesión de la diócesis al frente de la cual permaneció por tiempo relativamente corto, pues habiendo sido nombrado Obispo Auxiliar de Barquisimeto, el 15 de noviembre de 1970 salió de Guanare para ocupar el nuevo cargo al cual había sido destinado.

MONSEÑOR ANGEL POLACHINI RODRÍGUEZ, TERCER OBISPO DE GUANARE

Angel Polachini Rodríguez nació el 27 de enero de 1919 en Altagracia de Orituco (Edo. Guárico) y después de finalizar con excelentes resultados los estudios, en el Seminario de Calabozo, fue ordenado de Sacerdote por el Ilustrísimo Señor Obispo Arturo Celestino Alvarez.

Ejerció sus funciones sacerdotales en las parroquias de San Francisco Javier de Lezama de 1943 a 1946, en la del Valle de la Pascua de 1946 a 1955 y en la de Altagracia de Orituco, de 1955 a 1961.

Su conducta ejemplar y el celo que demostró en el desempeño de sus sagradas funciones le merecieron que en 1961 fuese nombrado Administrador Apostólico de la Prelatura de San Fernando de Apure.

Fue consagrado Obsipo titular de Rusticiana y Prelado de San Fernando de Apure, en esa misma ciudad, el 30 de abril de 1961 por el Señor Nuncio de Su Santidad en Venezuela, Monseñor Luis Dadaglio, siendo coconsagrantes los Señores Obispos de Calabozo y del Vicario Apostólico de Puerto Ayacucho, los ilustrísimos Miguel Antonio Salas y Segundo García, respectiva-mente. Como la Providencia lo destinaba para puesto más im-portante, por bula del 25 de marzo de 1971 fue nombrado para ocupar la Sede Episcopal de Guanare; y el 26 de junio de aquel mismo año tomó solemnemente posesión de su cargo. Guanare recibió con gran satisfacción al nuevo Prelado.

La foto adjunta recoge su entrada solemne en la Basílica Ca-tedral. Llevan el palio el Sr. Gobernador, Dr. Valdemar Cordero Vale, y el propio Ministro de Justicia y Cultos, Dr. Edilberto Escalante.

Monseñor Polachini se ha interesado vivamente por todo cuanto se relaciona con la buena marcha de la diócesis; ha realizado grandes trabajos y ensanchado el edificio del Seminario, se preocupa por todo lo relacionado con el culto de la Patrona Na-Cional, Nuestra Señora de Coromoto, principalmente por la organización de las peregrinaciones, pues es necesario que todas las diócesis de Venezuela tengan sus épocas fijas para realizarlas eficientemente al Santuario Nacional de la Patrona de Venezuela. Bajo cuyo amparo y égida le auguramos singulares frutos espirituales para la salvación de las almas y la renovación de la fe en nuestra querida Patria venezolana.

Para que la oración, que es savia divina que fecundiza a todas las obras espirituales, no falte en la diócesis, Monseñor Polachini consiguió para Guanare la fundación de una casa de las Siervas del Santísimo Sacramento, que principió a funcionar el 2 de febrero del año en curso.

Desde esta fecha, la adoración permanente del Santísimo Sacramento atrae las bendiciones del Cielo sobre el primero y principal centro nacional de peregrinaciones.

MONSEÑOR ANGEL POLACHINI RODRÍGUEZ